Últimamente y tras haber realizado varias lecturas
de obras literarias de varias décadas atrás mi mente recordó lo jodidamente
divertido que era escribir de vez en cuando para satisfacer esa necesidad
intelectual de expresarme de manera más detallada y menos fluida aparte del
habla. No sé porque siempre encontré al arte de escribir una manera más
ordenada de construir algo con mis repulsivos y desordenados pensamientos, que
incluso a día de hoy siguen siendo tan poco ordenados que ni siquiera eh
entrado al tema del título, pero así soy, divago y divago hasta terminar en
algo complemente distinto en lo que alguna vez imagine. Siempre lo imagino como
un río acaudalado que fluye sin parar, y por el infortunio mío estoy condenado
a dejarme llevar por sus bastas y potentes aguas.
¡Matalos, matalos a todos! >:D |
Pero bueno, divago y divago pero a mitad del camino
siempre recuerdo que había un tema del cual quería hablar y no era por estas
cosas tontas. Mientras me disponía a escribir un gran dilema se me atravesó por
la mente y paralizo toda la línea de producción de la fábrica de ideas. “¿De qué
putas iba a escribir?” Sagaz pensamiento nunca se me había ocurrido hasta estar
dispuesto a hacerlo. Había tantas temas los cuales podía hablar tantas palabras
y pensamientos cuales dedicar y plasmar, sin embargo, al final siempre queda
ese miedo de no poder concretar como tu quisieras el bello arte de la
escritura. Plasmar ideas no es fácil, o al menos nunca lo fue para mi. Mas sin
embargo eso no me iba a detener de poder hacerlo, obviamente, seré un torrente
de pensamientos sin escrúpulos pero cuando me decido a algo lo hago, así de
fácil.
Entonces al ver que no podía seleccionar un tema me
puse a escribir lo primero que se me vino a la mente. El titulo de esto,
“Adversidades de un pseudo-escritor” que me dirigió a lo que escribo ahora,
aunque solo eh dicho una a lo largo de todo esto. La que más me jode por el
momento. Aunque claro divague tanto, ni me acuerdo que coño estaba escribiendo
en la primera parte.
Quizá el querido lector de esto sienta que haya
perdido su tiempo tras escuchar el parloteo de un hombre que no tiene nada más
que disfrutar que escribir un poco para el, no lo culpo eso sí, yo me sentiría
igual de estafado esperando un intenso análisis y ejemplificación de las
dificultades pero no es así. Al final sin importar que tanta cosa se atraviese
en tu camino va a cuenta tuya si decides o no hacer algo al respecto como a su
vez si eso impedirá que tú logres lo que quieres. Al final de cuentas aunque
haya divagado tanto como yo solo, y no supiera que hacer. Hice lo que quise
hacer y esa satisfacción no me la va a quitar absolutamente nadie.
Y ahora que eh calentado en esto de escribir
debería seguir un rato mas…
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